Puebla
La Marquesa nunca se resignó a quedarse en casa
Sergio Pitol
Para Margo Glantz
Una sensación de desastre recorre el mundo. La novela la registra y, al hacerlo, resplandece. Mientras más huele a podrido en Dinamarca –y hoy Dinamarca parece ser buena parte del universo–, más indispensable se vuelve la novela. Última Thule, reflejo de un indomable impulso de sobrevivencia, de la preservación de la forma frente al caos, del esfuerzo sobre la abulia, del espíritu sobre la materia informe, la novela es todo eso y algunas cosas más. Avivada por tensiones extremas, testigo de desgarraduras violentas, nutrida a veces de caviar y perdices y otras con carroña, reaparece hoy en el escenario internacional con salud envidiable. Florece con una plenitud que envidiarían las rosas. Hela ahí: proteica, generosa, arriesgada, ubicua, escéptica, respondona, indócil. Cada crisis de la sociedad la hace regenerarse. Cambia de piel cuando le … Leer más »
Profética [puebla]
por Rafael Toriz
Platicar la copa
Conversación en el convento
Ser, parecer y mantener una librería en México es un arte consumado, no apto para indolentes y mucho menos para advenedizos. En un país donde el hábito de la bebida es un deporte nacional y la realidad desaforada exige una interpretación permanente, la invitación a los libros resulta –por principio– un desatino, luego un extravío. Finalmente un agasajo.
Por ello, y para que la empresa fructifique, algunos osados han pergeñado –con distinta fortuna- un híbrido fascinante que cumple como nada dos necesidades esenciales: el bar librería, es decir, la copa aceitada por la lubricidad de los libros, idea que se parece bastante a mi concepción del paraíso.
Entre las diversas opciones para ponerse hasta la madre entre pocos pero doctos libros juntos, la más conspicua, elegante y regia de toda la … Leer más »